En una cantera del Reino Unido, la Agencia Espacial Europea (ESA) está realizando pruebas con un rover de cuatro ruedas conocido como Codi. Este vehículo, equipado con un brazo robótico y un avanzado sistema de visión artificial, es capaz de recoger tubos de muestra de forma totalmente autónoma.
Codi se mueve con una precisión de hasta 10 centímetros, mapea continuamente el terreno a medida que avanzas. Utiliza su brazo robótico y cuatro cámaras para localizar tubos de muestra, recogerlos y almacenarlos de forma segura en el rover, todo ello sin intervención humana. En cada parada, el rover utiliza cámaras estéreo para crear un mapa de 180 grados de su entorno y planificar su próximo movimiento. Una vez detenido, la cámara situada en el mástil del rover detecta el tubo y calcula su posición relativa al vehículo, iniciando una secuencia compleja con el brazo robótico para acercarse a la muestra, recogerla y almacenarla.
Los tubos de muestra recolectados por Codi son réplicas de los que utiliza actualmente el rover Perseverance de la NASA. para recolectar el precioso suelo marciano. Para muchos, su forma recuerda a los famosos sables de luz de las películas.
Si bien el suelo rojizo de la cantera no replica completamente la composición del suelo marciano, presenta una serie de pendientes y rocas de diferentes tamaños que simulan las condiciones que un rover podría encontrar en la superficie de Marte. Estas pruebas en entornos naturales representan una fase crucial en el proceso de desarrollo, ofreciendo un paisaje dinámico y único que no se puede replicar en interiores.
La ESA continúa investigando y perfeccionando las capacidades de Codi con miras a futuras misiones espaciales, garantizando que Europa continúe promoviendo la exploración espacial autónoma.